El presidente de la Conferencia Episcopal valoró el "admirable esfuerzo" efectuado en el rescate minero.
Se deben garantizar mejores condiciones laborales, afirmó.
El presidente de la Conferencia Episcopal, Alejandro Goic, celebró este jueves en la ciudad de Rancagua el exitoso rescate de los 33 mineros realizado en la víspera en Copiapó.
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| El religioso llamó a los chilenos a seguir orando por los mineros y por sus familias. (Foto: UPI) |
"Con inmensa alegría alabamos y bendecimos al Señor por el rescate de los 33 hermanos mineros", dijo el obispo de Rancagua, al dar a conocer la declaración oficial "Junto a un pueblo agradecido al Dios de la Vida".
Goic valoró el "admirable esfuerzo" que hicieron técnicos y profesionales nacionales y extranjeros -muchos de ellos provenientes de Rancagua; "tierra de héroes", dijo- para conseguir rescatar a los trabajadores a salvo.
El prelado también comparó este hito con el terremoto que azotó al país en febrero, e indicó que si la catástrofe enseñó al país la importancia de retomar la preocupación por el cumplimiento de las normas antisísmicas, este accidente debe enseñar a los empresarios y autoridades a trabajar para garantizar un trabajo digno para los hombres que trabajan en precarias condiciones en la actividad minera.
"Yo creo que nunca más debe ocurrir un accidente de esta naturaleza. En un país que cada 20 años, más o menos, tiene un terremoto importante, no podemos seguir construyendo casas como las que se han estado haciendo, y lo mismo las minas: deben tener la máxima seguridad y garantizar que los hombres que bajen a ese trabajo tan esforzado tengan la certeza de que se ha hecho todo lo posible para garantizar su seguridad física", señaló.
El religioso llamó, finalmente, a los chilenos a seguir orando por los mineros y por sus familias en los próximos días, deseando que su experiencia "no se farandulice" y que los trabajadores puedan soportar con tranquilidad la nueva presión que les dará su popularidad a nivel nacional.
