"Hay que tener serenidad y firmeza (...), pensando en el interés nacional: qué es lo que nos conviene más para obtener el resultado que buscamos", dijo el excanciller.
Recalcó la necesidad de que se cumpla el tratado de extradición entre ambos países, vigente desde el año 1962.
"No soy partidario de romper relaciones diplomáticas con Venezuela", dijo en Cooperativa el excanciller y ex subsecretario general de la ONU Heraldo Muñoz (Partido Socialista).
Este viernes, distintas figuras políticas alzaron la voz para pedir que el Gobierno rompa lazos con Caracas, a raíz de la revelación del fiscal Héctor Barros de que el secuestro y asesinato del exmilitar y disidente venezolano Ronald Ojeda -perpetrado en febrero pasado en Santiago- fue orquestado desde el país caribeño, sumado al crimen del carabinero Emmanuel Sánchez, acribillado el miércoles tras enfrentar a delincuentes venezolanos.
Estos episodios terminaron de tensar la relación entre ambos países, que partió la semana en mal pie luego de que el canciller del régimen de Nicolás Maduro, Yván Gil, negara la existencia de la organización criminal Tren de Aragua. En protesta por estas declaraciones, el Presidente Gabriel Boric llamó ayer a consultas a su embajador en Venezuela, Jaime Gazmuri.
"Lo primero es que hay que tener serenidad y firmeza, pero operar con la cabeza fría, pensando en el interés nacional: qué es lo que nos conviene más para obtener el resultado que buscamos", recomendó Muñoz esta noche en entrevista con Lo Que Queda del Día.
El exmilitante y extimonel del PPD opinó que "el llamado a informar del embajador Gazmuri en Caracas ha sido una clara señal de malestar con las declaraciones y las acciones del régimen venezolano y lo que se requiere, a mi juicio, es agotar todos los recursos y los canales diplomáticos para conseguir -como dijo la ministra Tohá (Carolina Tohá, titular de Interior) en la mañana- la extradición de los dos individuos identificados en el secuestro y asesinato del teniente Ojeda y que estarían en Venezuela".
El otrora ministro de Relaciones Exteriores durante el segundo Gobierno de Michelle Bachelet (2014-2018) habló del tema poco después de que el fiscal general venezolano, Tarek William Saab, asegurara que está buscando a los dos ciudadanos venezolanos señalados como involucrados en el crimen de Ojeda y que, según el Ministerio Público chileno, se habrían fugado hacia el país caribeño.
Muñoz arguyó que "es necesario tener siempre las puertas entreabiertas" con Venezuela, reivindicando que "aunque dos Gobiernos estén enfrentados, siempre es importante la diplomacia", que existe justamente "para resolver situaciones complejas o difíciles". "Ese es el instrumento y el mérito de la diplomacia", subrayó.
En ese sentido, tildó de "ingenuo pensar que se conseguirán resultados rompiendo relaciones (...) El rompimiento de relaciones lo que hace es dañar la posibilidad, aunque sea remota, de que se resuelvan algunos asuntos".
En el diálogo con Cooperativa, Muñoz destacó la necesidad de que se cumpla el tratado de extradición entre ambos países, vigente desde el año 1962.
"Un tratado de extradición vigente, que no ha sido repudiado por ninguna de las partes, es lo que tiene primacía y debiera, entonces, permitir eventualmente la extradición de esos individuos si están en Venezuela", señaló el diplomático.
"Entiendo que, paralelamente, el Ministerio Público nuestro ya pidió a Interpol (Policía Internacional) la búsqueda y detención de estos individuos si es que no se encuentran en territorio venezolano -es decir, en cualquier lugar del mundo- y es muy importante que Interpol ya tenga esa información y esa petición del Ministerio Público. Pero, en el caso de Venezuela, si se detienen con fines de extradición, debiera operar el tratado que está vigente, aunque sea en el año 62", subrayó el militante socialista.
"Es una cuestión jurídica, pero también política", sentenció.
