Astrónomos chilenos participaron en el mayor censo de agujeros negros supermasivos
Tras más de una década de investigación usando observatorios orbitales y grandes telescopios en el norte de Chile.
Tras más de una década de investigación usando observatorios orbitales y grandes telescopios en el norte de Chile.
Tras más de 15 de años de extensa investigación, un equipo científico internacional dio a conocer el mayor censo de agujeros negros supermasivos en el universo cercano o local, que incluyó una destacada participación de astrónomas y astrónomos del Centro de Astrofísica y Tecnologías Afines (CATA) desde Chile.
La investigación, presente en la última edición de la revista Astrophysical Journal, incluye una serie de publicaciones científicas que utilizaron datos de grandes telescopios en el norte de nuestro país, Estados Unidos y el Observatorio Espacial Swift, de la NASA.
Se trata de horas de observación y análisis a aquellos colosos que crecen devorando todo en los núcleos activos de galaxias y que llegan a tener hasta miles de millones de veces la masa de nuestro Sol.
"El mapa es representativo de los agujeros negros activos en el universo local. Cuenta con más de 800 agujeros negros supermasivos en un rango de distancia de más de 5 mil millones de años luz. La novedad principal es que se pudo estimar las propiedades fisicas más importantes para una gran muestra de agujeros negros supermasivos, como sus masas y tasas de crecimiento", explica Claudio Ricci, astrónomo CATA de la Universidad Diego Portales, uno de los investigadores principales del proyecto BASS Survey.
Ezequiel Treister, subdirector de CATA y astrónomo UC que también formó parte de la investigación, destaca que hubo "un trabajo colaborativo, que requirió el trabajo combinado de telescopios en el hemisferio sur y el hemisferio norte, para poder estudiar los núcleos activos de galaxias distribuidos en todo el cielo. Las medidas de masa fueron posibles gracias a muchísimas observaciones realizadas desde Chile".
Decenas de científicos CATA participaron de la extensa acumulación de datos utilizando telescopios chilenos durante todos estos años, incluyendo el Very Large Telescope de ESO en Cerro Paranal (en la Región de Antofagasta), los telescopios Magallanes y el Telescopio Irénée du Pont (ubicados en la Región de Atacama), junto al Telescopio SOAR, ubicado en Cerro Pachón en la Región de Coquimbo.
"Medir masas de agujeros negros puede ser bastante complicado, y con este trabajo colaborativo hemos podido hacerlo para una muestra muy completa de objetos en el universo cercano", afirma Claudio Ricci.
Los astrónomos concluyen que la gran muestra de objetos, y la enorme cantidad de datos acumulados en los últimos años, harán posible mejorar la comprensión de los agujeros negros, permitiendo entender su relación con sus galaxias anfitrionas. Así se podrán estudiar fenómenos como la acumulación de gas en las galaxias y su influencia en la formación de ciertas estrellas, analizar el crecimiento acelerado de agujeros negros supermasivos, y también investigar sistemas de agujeros negros que podrían considerarse raros o anormales.