Serbia exigirá formalmente a las Fuerzas de la OTAN para Kosovo (KFOR) desplegar soldados y policías propios en su exprovincia, "conforme a la Resolución 1244 del Consejo de Seguridad de la ONU", anunció este sábado el presidente serbio, Aleksandar Vucic.
El mandatario aseguró en Belgrado que esa resolución, del año 1999, "prevé sin ambigüedades que esta demanda debe ser aceptada" y que "contempla ue el ejército y la policía de Serbia podrán volver a Kosovo para ejercer determinadas funciones".
Vucic añadió que a pesar de ello no se hace ilusiones de que KFOR vaya a aceptar la exigencia serbia, "pese a tener el deber de aceptarla" y añadió que la fuerza liderada por la OTAN "buscarán un sinfín de razones para rechazarla".
Según dijo el presidente en una declaración, los serbios de Kosovo son objeto de constantes maltratos, injusticias y una tiranía por parte de las autoridades albanokosovares "apoyadas por Occidente".
Acusó a Pristina de haber violado todos los acuerdos sobre la normalización estipulados hasta ahora con mediación de la Unión Europea (UE).
Por eso, advirtió Vucic, Serbia no quiere seguir negociando si Kosovo no cumple lo ya acordado, especialmente la creación de una autonomía para los serbios del norte de Kosovo.
El presidente serbio expresó su pleno apoyo a los serbios que han colocaron barricadas en el norte de Kosovo para impedir que la policía kosovar pudieran trasladar a un expolicía serbio detenido bajo sospecha de terrorismo.
Vucic afirmó que a los serbios en las barricadas "ya no les queda otra opción". "No pueden y no quieren soportar ya esa tiranía", dijo el presidente conservador populista serbio.
La policía kosovar, por su parte, informó de durante los bloqueos se produjeron algunos disparos contra agentes de fronteras cerca del paso de Bernjak, cerrado por razones de seguridad, junto con el de Jarinje.
"Las unidades policíacas se vieron obligadas a responder disparando con armas de fuego en defensa propia hacia los grupos criminales y los forzaron a retroceder", aseguró la policía en un comunicado, citado por el diario Koha Ditore.
RESPUESTA DE KOSOVO
El primer ministro de Kosovo, el nacionalista Albin Kurti, respondió a Vucic acusando a Serbia de crear estructuras criminales en el norte de Kosovo.
"Si la Unión Europea y Estados Unidos no castigan esta violencia, eso solo animará a Belgrado a impulsar más la desestabilización de Kosovo", dijo el primer ministro.
"Las barricadas de criminales encapuchados en el norte (de Kosovo) deben ser retiradas de inmediato. Los criminales y rusófilos van a fracasar. La República de Kosovo va a ganar", concluyó en un comunicado emitido en Facebook.
Kosovo, una antigua región autónoma de Yugoslavia en el marco de Serbia, proclamó su independencia en 2008.
La policía serbia y el ejército yugoslavo se retiraron de Kosovo en verano de 1999 tras el final de la guerra.