Los niveles de radiactividad en un radio de 80 kilómetros alrededor de la planta nuclear de Fukushima han disminuido en un 65 por ciento desde la catástrofe nuclear acaecida en marzo de 2011, según informaron las autoridades japonesas.
Los datos, recopilados por la Autoridad de Regulación Nuclear (NRA) y facilitados a Efe, muestran un descenso significativo de las radiaciones en las zonas más próximas a la central, gracias a los trabajos de descontaminación llevados a cabo en los últimos cinco años.
Las zonas afectadas por mayores niveles de radiación (superiores a los 19 microsieverts por hora), al noroeste de la central, se han reducido de forma notable desde el primer mes después del accidente hasta la última medición, realizada a comienzos del pasado noviembre.
También ha disminuido la radiación en las áreas que registraban niveles de entre 0,1 y 1,9 microsieverts, en localidades al sur de las prefecturas de Miyagi y Fukushima y al norte de la colindante Ibaraki, según el informe de la NRA.
El regulador nuclear nipón recopiló estos datos a partir de mediciones de radiación realizadas por helicóptero a una altura de un metro sobre el suelo.
Tras el estallido de la crisis nuclear provocada por el terremoto y el tsunami del 11 de marzo de 2011, el gobierno nipón ordenó evacuar total o parcialmente ocho municipios situados a distancias de hasta 30 kilómetros de la central nuclear, y desde entonces unas 70.000 personas continúan sin poder volver a sus hogares.
La catástrofe de Fukushima es considerada el peor accidente nuclear desde el de Chernóbil (Ucrania) en 1986, y sus emisiones y vertidos también afectaron gravemente a la pesca, la agricultura y la ganadería locales.