Las autoridades egipcias deploraron que se proceda este jueves a la subasta de un busto de unos 3000 años de antigüedad del faraón niño Tutankamón que se ha convertido en el objeto estrella de la sala británica Christie's en Londres y que El Cairo ha buscado detener, sin éxito hasta el momento.
En un comunicado conjunto, los Ministerios de Antigüedades y el de Exteriores egipcio aseguraron que el proceso de venta está "en contra de los acuerdos y tratados internacionales" ya que la casa Christie's no mostró a la parte egipcia los documentos ni la data de estas piezas.
Ayer miércoles se procedió a la venta de algunas piezas egipcias, mientras que el objeto estrella será subastado este jueves, según lo previsto.
El embajador egipcio en Londres, Tareq Adel, destacó en la nota que Christie's "insiste en celebrar la subasta a pesar de las oposiciones y observaciones legales" por parte de Egipto que ha pedido aplazar el evento para "precisar y asegurar la legitimidad de esta pieza".
De acuerdo con la Convención de 1970 sobre las medidas que deben adoptarse para prohibir e impedir la importación, exportación y transferencia de propiedad ilícita de bienes culturales de la Unesco, cualquier objeto adquirido y sacado de un país sin un documento legal de exportación después de esa fecha se considerará ilegal.
Es decir, cualquier pieza que haya salido de Egipto después de 1970 que no cuente con un certificado de exportación se supone por defecto robada.
La embajada de Egipto en Londres "prosigue con sus esfuerzos y con todos los procedimientos, con la cooperación del Ministerio de Antigüedades egipcio, para suspender la venta ilegal del patrimonio cultural egipcio".
Este jueves se venderá un pequeño busto del dios Amón representado con las facciones de Tutankamón y que posiblemente cambie de manos por un precio que la compañía inglesa estima rondará la cifra de 4 millones de libras esterlinas (unos 4,5 millones de euros -5 millones de dólares-).
La escultura presenta la corona distintiva de Amón, que debió de estar completa con dos grandes plumas dobles (representación tradicional del dios), mide unos 28,5 centímetros y tiene aproximadamente 3000 años.
Christie's afirma que el objeto es vendido por Resandro, una de las colecciones privadas de arte egipcio más importantes y a la que, recuerda la compañía británica, ya ayudó a vender 3 millones de libras en objetos hace tres años.