El líder norcoreano, Kim Jong-un, y el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, hablaron el sábado de fortalecer "la coordinación estratégica y táctica" de los ejércitos de ambos países, en el marco de la gira por Rusia del líder norcoreano.
Después de que Kim inspeccionara en la víspera bombarderos estratégicos rusos y misiles hipersónicos Kinzhal en una base aérea, y visitara después un cuartel de la Flota del Pacífico en el entorno de la ciudad de Vladivostok, en la región de Extremo Oriente, Shoigú organizó un almuerzo para el líder norcoreano y su delegación, informó hoy la agencia estatal KCNA.
Durante el evento, Shoigú expresó "su voluntad de profundizar aún más la amistad y la cooperación entre los ministerios de Defensa de los dos países", al tiempo que su homólogo norcoreano, Kang Sun-nam, habló de "fortalecer aún más la unidad y cooperación con el Ejército ruso y salvaguardar con responsabilidad la paz y la estabilidad regional y global".
Tras el encuentro, Shoigú y Kim mantuvieron una reunión en la que "intercambiaron opiniones constructivas sobre cuestiones prácticas que surgen en el fortalecimiento de la coordinación estratégica y táctica, sobre la cooperación y el intercambio mutuo entre las fuerzas armadas de los dos países, y los campos de defensa y seguridad nacionales".
Kim y Shoigú ya se reunieron en varias ocasiones en Pionyang en julio, donde, según la Inteligencia surcoreana, el ministro ruso propuso celebrar maniobras navales conjuntas con Rusia y China.
Durante su viaje a Rusia, el más largo que ha hecho Kim desde que comenzó a gobernar en 2011, el líder norcoreano y el presidente ruso, Vladímir Putin, celebraron una cumbre en el cosmódromo de Vostochni, en la región de Amur, y aunque los detalles no se han hecho públicos, Putin aseguró que hay espacio para la cooperación militar y espacial entre los dos países.
Se desconoce cuál es la agenda de Kim para los próximos días ni cuándo tiene previsto retornar a su país.