Datos de la Subsecretaría de Desarrollo Regional y Administrativo (Subdere) evidenciaron que a la fecha hay 2.036.224 animales oficializados en el Registro Nacional de Mascotas. Se trata de 1.548.857 perros y 487.367 gatos inscritos legalmente a lo largo del país, siendo la Región Metropolitana la que cuenta con una concentración mayor de ambas especies.
Un estudio de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Católica y de la Subdere estimó que en Chile hay más de 12 millones de perros y gatos con dueños y 4 millones sin ellos, informó El Mercurio.
Entre la cifra total de canes, hay más de 24 mil catalogados como potencialmente peligrosos (PPP) que representan un 1,22% del registro global, la proporción más alta desde su implementación; de ellos, hay alrededor de 6 mil en la capital y 3,4 mil en la Región de Valparaíso.
En cuanto a los felinos, en todas las regiones su presencia es menor a la de los perros.
RAZAS POTENCIALMENTE PELIGROSAS
Pese a que la Ley de Tenencia Responsable de Mascotas y Animales de Compañía establece como razas de perros potencialmente peligrosas a los Bullmastiff; Doberman; Dogo Argentino; Fila Brasileiro; Presa Canario; Presa Mallorquín; Rottweiler y Tosa Inu, diferentes expertos afirman que la actitud de riesgo que puede presentar un perro se debe a los cuidados de los dueños, principalmente.
Fernando Mardones, veterinario de la Universidad Católica, afirmó que si bien "hay razas predisponentes", "todo animal criado bajo condiciones de bienestar, cuidado y entendimiento va a ser sociable y dócil".
"La condición del perro en su domesticación es que sea dócil y sociable, pero cuando no entendemos las características propias de ciertas razas, que tienen un instinto más desarrollado, y no entendemos cómo es ese comportamiento, claramente vamos a tener problemas", precisó.
Además, planteó que "todos los días tenemos registros de mordeduras de animales, con tasas muy altas que varían en diferentes comunas del país", lo que "tiene que ver con que muchas veces no entendemos el comportamiento de las diferentes razas o animales". Según él, "eso requiere un componente adicional" en el cuidado.
Marcela Pérez de Tudela, representante de World Small Animal Veterinary Association en Chile (Wsava), apuntó que "el problema no está en los perros, sino que en los cuidadores". Esto, ya que "el cuidador tiene que ser responsable si tiene un animal que tiene un potencial de agresividad".
"Los perros alcanzan a entender 15 órdenes consecutivas, como un niño de un año y medio, pero ahí depende de quién lo guíe. Creo que es muy importante cuando tienen un perro potencialmente agresivo que el cuidador sea responsable con su mascota, así que no les echemos la culpa a los animales", dijo.
RECOMIENDAN EL ASESORAMIENTO CON ETÓLOGOS
Los expertos llamaron a que si las personas se enfrentan a un perro de estas características se asesoren con etólogos, expertos enfocados en el comportamiento animal, el equivalente a los psicólogos para las personas.
Los dueños de perros con estas características deberían "asesorarse con un profesional, un etólogo; además de sacarlo muchas veces al día, darle la alimentación correcta y no guiarse por lo que está escrito sino tiene una base científica", recomendó Pérez de Tudela.