El ministro del Interior trasandino aseguró que Uruguay no cumplió con su parte del trato de paralizar las faenas de las plantas de celulosa por 90 días para negociar una solución a la controversia.

Uruguay derivó al Mercosur el conflicto por las celulosas con Argentina luego que el Gobierno de Néstor Kirchner no respondió a la última propuesta de la República Oriental.

La Asamblea Ambiental de Gualeguaychú tomó la medida en rechazo a la decisión de una empresa finlandesa que sólo suspenderá por 10 días la construcción de una planta de celulosa.

La decisión fue tomada por los directivos de la compañía española Ence para cumplir el "compromiso de contribuir al diálogo" entre Montevideo y Buenos Aires.

La determinación permitirá el inicio de las conversaciones tendientes a superar el conflicto con Argentina a causa del daño que provocaría al medioambiente la instalación de las plantas de celulosa.

Luego de finalizado el bloqueo fronterizo, el gobierno de Néstor Kirchner solicitó a Montevideo que emita alguna resolución con respecto al daño ambiental que producen las celulosas ubicadas en el sector.

La noche del miércoles los vecinos y organizaciones ecologistas de la ciudad trasandina de Colón levantaron el bloqueo que tenían hacia Paysandú.

"Se empieza a destrabar una situación muy difícil", manifestó Montevideo luego que cedieran en la protesta un grupo contrario a la construcción de dos papeleras.

La Armada de la República Oriental reforzó el resguardo en la frontera con Argentina, que fue escenario de manifestaciones contra la construcción de plantas de celulosa.

Presidente Tabaré Vázquez planteó la posibilidad ante la nula respuesta de su homólogo trasandino por el bloqueo de vías que conducen a las papeleras que se construyen en la República Oriental.

El corte de caminos en protesta por la instalación de la plantas de celulosa en el río Uruguay obligó a García Moritán a regresar a Argentina en una lancha tras una reunión Paysandú.