Al menos 14 civiles murieron y 97 resultaron heridos este lunes como consecuencia de los ataques lanzados por Rusia contra ciudades de toda Ucrania, según dijo ante la ONU la delegación de Kiev.
Inicialmente, el balance ofrecido por las autoridades ucranianas era de 10 fallecidos y 60 heridos en estos bombardeos que Moscú presentó como una respuesta al ataque de este fin de semana contra el puente de Crimea, del que responsabiliza a los servicios secretos ucranianos.
En un discurso ante la Asamblea General de Naciones Unidas, el embajador ucraniano, Sergiy Kyslytsya, denunció que los ataques golpearon instalaciones energéticas, edificios de viviendas, escuelas y universidades, museos y centros urbanos.
"El mundo entero ha visto una vez más la verdadera cara del Estado terrorista que asesina a nuestra gente. Sufriendo derrotas en el campo de batalla, Rusia la toma con los pacíficos residentes de las ciudades ucranianas", señaló el diplomático.
PROYECTO DE RESOLUCIÓN
Kyslytsya se refirió a los ataques de este lunes en el inicio de su discurso para presentar un proyecto de resolución con el que Kiev y sus aliados buscan que la Asamblea General de la ONU condene las anexiones rusas de partes de Ucrania.
El proyecto es muy similar a uno que recientemente vetó Rusia en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y, al igual que aquel, demanda a Moscú dar marcha atrás a sus acciones sobre el estatus de las regiones de Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón y le exige que retire sus tropas inmediatamente y sin condiciones de Ucrania.
Ante ese veto, Kiev y sus aliados optaron por acudir a la Asamblea General, donde ningún país puede vetar una resolución.
Así, ese órgano -en el que se sientan los 193 Estados miembros de la ONU- reabrió este lunes su sesión especial de emergencia sobre la guerra en Ucrania para comenzar a debatir la cuestión.
Con decenas de países inscritos para intervenir, fuentes diplomáticas prevén que la resolución no se vote como pronto hasta el miércoles.
BIDEN PROMETE QUE PUTIN RENDIRÁ CUENTAS POR LOS ATAQUES
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, condenó este lunes los bombardeos a gran escala de Rusia contra varias ciudades de Ucrania y prometió que el mandatario ruso, Vladímir Putin, rendirá cuentas por las "atrocidades" cometidas durante la guerra.
"Estados Unidos condena firmemente los ataques rusos con misiles de hoy en Ucrania, incluida Kiev. Estos ataques mataron e hirieron a civiles, además de destruir infraestructura no militar", criticó el presidente estadounidense en un comunicado.
Biden y el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, mantuvieron este lunes una conversación telefónica en que el estadounidense trasladó al ucraniano sus condolencias por los ataques y le prometió seguir proveyendo ayuda militar, incluidos sistemas avanzados de defensa aérea, al país europeo.
El mandatario consideró que dichos bombardeos "demuestran una vez más la completa brutalidad de la guerra ilegal del señor Putin contra el pueblo ucraniano".
"Estos ataques solo refuerzan nuestro compromiso con el pueblo de Ucrania. Junto con nuestros aliados, seguiremos imponiendo costos a Rusia por su agresión, haremos que Putin y Rusia rindan cuentas por sus atrocidades y crímenes de guerra; y suministraremos el apoyo necesario para que las fuerzas ucranianas defiendan a su país", aseveró.
Por su parte, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, adoptó "nuevas disposiciones para ayudar militarmente a Ucrania" tras los ataques rusos del lunes sobre numerosas ciudades ucranianas, anunciaron esta madrugada fuentes del Elíseno.
Macron se reunió de urgencia esta noche con el ministro de Defensa, Sebastien Lecornu, y con la titular de Exteriores, Catherine Colonna, para evaluar la situación. Al término del encuentro, ya en la madrugada del martes, fuentes del Elíseo hicieron el anuncio pero no ofrecieron detalles acerca de esa nueva ayuda militar a Kiev.
"Estoy conmocionada y horrorizada por los despiadados ataques en Kiev y otras ciudades ucranianas. Una vez más, Rusia ha demostrado al mundo lo que representa: el terror y la brutalidad. Los responsables deben rendir cuentas", dijo la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.