Estación Central: Condenan a mujer que guardaba 30 kilos de cocaína bajo su cama
Deberá cumplir siete años de cárcel.
Deberá cumplir siete años de cárcel.
Las mayores incautaciones de la "droga zombie" en Chile corresponden a "mermas" de recintos médicos desviadas desde algún área hospitalaria.
Solo esta semana, el Hospital de Iquique informó de la sustracción de una ampolla de 10 milímetros con esta sustancia.
El grupo se componía de un ciudadano europeo y otro peruano (encargados de la logística) y dos chinos acusados de mover el dinero con transferencias informales.
Se sospecha que la droga sería enviada por vía marítima hacia Países Bajos a través del puerto de San Antonio.
La máxima medida cautelar se aplicó a 11 de los 24 imputados tras operativo de la PDI.
Coordinaban la entrega de sustancias ilícitas a distintos distribuidores.
La lectura del fallo se realizará el sábado 17 de diciembre, a las 11.00 horas.
Tiene entre sus objetivos "alivianar la carga que significa la cantidad de estas personas en las cárceles del país", explicó la ministra Marcela Ríos.
Si en 2013 había en Chile un 3,7% de presos de otras nacionalidades, a abril de este año ya representaban el 10,3% de la población penal.
Tras ser formalizados, el hombre quedó en prisión preventiva y su novia con arresto domiciliario.
Los cuatro responsables ocultaron la droga en su cuerpo, mediante la utilización de fajas, en un vuelo procedente de Roma en diciembre de 2018.
Tras su detención en esa fecha, se logró el decomiso de armas y municiones en un domicilio de Colina.
El tribunal de alzada acogió la apelación formulada por la Fiscalía tras la maratónica jornada de formalizaciones del viernes.
Consideró que la libertad de estos sospechosos "constituye un peligro para la seguridad de la sociedad".
Luis Toledo, jefe de la Unidad de Tráfico de Estupefacientes del Ministerio Público, señaló que el fenómeno muestra hoy una magnitud "mucho peor que hace cinco años".
La situación se grafica en la cuantía de los decomisos, la instalación de carteles extranjeros y la detección de vínculos con organizaciones de Colombia, Venezuela y México.
Se suma a ello la corrupción de funcionarios públicos -por ejemplo gendarmes- "que imposibilita el esclarecimiento total" de los delitos, dijo a Cooperativa el ex fiscal del caso Caval.
El sujeto fue interceptado en septiembre de 2020, cuando intentaba ingresar a Chillán con más de medio kilo de marihuana, tras lo cual intentó huir, provocando lesiones a dos detectives y a vehículos policiales.
El interno fue sorprendido hace dos años con 137 dosis de pasta base, 12 dosis de marihuana y 12 comprimidos de Clonazepam.
El hecho se produjo el 31 de julio del año pasado en el Aeropuerto Carlos Ibáñez del Campo.
En su cuerpo llevaba adosado más de 2 kilos de clorhidrato de cocaína.